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¿Cómo hacerle una prueba de ADN a tu gato?

Guía práctica y amena que explica paso a paso cómo realizar un test de ADN felino de forma sencilla en casa. Combina consejos de manejo animal con ciencia para descubrir la salud, rasgos y razas de la mascota.

Miras a tu gato mientras duerme en esa posición imposible y te preguntas: «¿De dónde vienes, pequeña bola de pelo?».

La genética felina ha dejado de ser cosa de laboratorios secretos para llegar al sofá de tu casa. Pero claro, surge la gran duda: sabemos que los gatos no son precisamente fans de colaborar.

¿Cómo funciona una prueba de ADN para gatos?

¿Necesitamos sangre? ¿Un mechón de pelo?

¡Nada de eso! La ciencia moderna es mucho más amable. El proceso se basa en la genotipificación. Todo lo que necesitamos son las células epiteliales que se encuentran en las mejillas de tu gato. Sí, su saliva contiene el mapa completo de su historia evolutiva.

Al analizar esa muestra, comparamos sus marcadores genéticos con miles de perfiles en nuestra base de datos. Esto nos permite desglosar su árbol genealógico, identificar razas, rasgos físicos y, lo más importante, detectar posibles enfermedades hereditarias.

Cómo hacer una prueba de ADN a un gato

Si has buscado «Cómo hacer una prueba de ADN a un gato», probablemente te imagines una batalla campal. Pero si sigues estos pasos, será pan comido (o atún comido).

Paso 1: El momento estratégico

No intentes hacerlo cuando tu gato está en modo «caza» o corriendo por el pasillo a las 3 a.m. (los famosos zoomies). Espera a que esté medio dormido, relajado y mimoso. El soborno con chuches es totalmente legal y recomendado en esta jurisdicción.

Paso 2: La técnica del «Burrito» (Opcional pero recomendada)

Si tu gato es de los que se convierten en líquido o sacan las uñas al ver algo extraño, envuélvelo suavemente en una toalla o manta, dejando solo la cabeza fuera. Esto te da control y le da a él una sensación de seguridad (y a ti, integridad física).

Paso 3: La toma de muestra

Los test de ADN para gatos de Koko Genetics viene con hisopos (bastoncillos) especiales.

  1. Introduce el hisopo suavemente en la boca del gato, entre la encía y la mejilla.
  2. No hace falta ir profundo, solo en el lateral.
  3. Frota suavemente y gira el hisopo durante unos segundos. La idea es recoger células, no solo saliva, así que asegúrate de que toque la pared interna de la mejilla.

Es probable que tu gato ponga cara de ofendido. Es normal. Pídele perdón con una caricia.

Paso 4: El secado

Los kits de Koko Genetics para gatos vienen equipados con una bolsa especial de secado activo junto a su torunda Rapidri. Inmediatamente después de tomar la muestra, introduce el hisopo directamente dentro de esta bolsa y séllala siguiendo las instrucciones. La tecnología de la bolsa se encargará de secar la muestra rápidamente y protegerla de bacterias hasta su llegada al laboratorio.

Paso 5: Envío junto a la empresa de transporte

Mete la muestra en el sobre de retorno y envíanosla. ¡Listo!

Más allá de la curiosidad, conocer el ADN de tu gato es un acto de amor. Entender su herencia te ayuda a comprender por qué actúa como actúa, pero sobre todo, te permite anticiparte a problemas de salud futuros.

Hacerle el test es cuestión de segundos; la información que obtienes dura para toda sus (siete) vidas.